El
valor fundamental de la justicia es reflejo del desarrollo de las fuerzas
productivas, las relaciones de
producción. La justicia esclavista, feudal, capitalista. Y de las relaciones
sociales derivadas de la producción, justicia monárquica, en poder del rey del
Estado esclavista, feudal. Justicia republicana,
democrática burguesa, ganada por la revolución francesa en 1789, contra la
justicia del rey, Francia, Alemania, Italia, Estados Unidos de Norteamérica. El capitalismo en su desarrollo imperialista,
generó Estados monárquicos republicanos, al lado del rey, existencia de
parlamento, caso España e Inglaterra. Estado de Nueva democracia, o democracia
popular, de justicia popular, china, Rusia. Dictatorial.
Dictadura
en la que el presidente tiene poderes sobre el ejecutivo, el
legislativo, propio de los Estados al
servicio imperial, capital financiero, que lesiona la
justicia en su independencia, autonomía, decisiones judiciales, haciéndola lenta, e ineficaz, cargada las más de las
veces, de selectividad e impunidad. Como los Estados de América Latina, en particular de
Colombia, favoreciendo a la oligarquía empresarial corporativa pro imperial.
Instaurado
en Colombia con la dictadura de Simón Bolívar y su creación dictatorial del
fuero, la Procuraduría y el Consejo de Estado. Reafirmada con el
negociado sobre Panamá, del imperialismo yanqui con la oligarquía conservadora de Marroquín y
el dictador Rafael Rreyes para asegurar la entrega de la soberanía nacional al imperialismo yanqui, como lo denunció José
María Vargas Vila. Dictadura, donde se
le niega a la justicia su elección popular por medio del voto, para la integración de los
magistrados de las altas cortes, la designación de fiscal y Procurador. Haciéndola
depender del Presidente y del Congreso de la república.
Claros
ejemplos: El desconocimiento de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia
del perfil exigido en la Constitución para la designación de Fiscal. Las
actuaciones A FAVOR DE LA OLIGARQUÍA DE MAGISTRADOS DE LAS ALTAS CORTES; de quienes
han ocupado el cargo de Fiscal General, Procurador de la Nación. La corrupción
en la selección de tutelas en la Corte Constitucional, la intervención al
respecto solicitada por magistrados de la Corte Constitucional, al Presidente
de la República. El denunciado cartel de la toga.
La
lentitud en las investigaciones, haciendo operar la prescripción, justicia tardía
no es justicia. La lentitud en la Corte Suprema de las múltiples
investigaciones contra el expresidente Alvaro Uribe Vélez. El temor denunciado
por algunos magistrados de la Corte Suprema, por estos procesos. El
congelamiento a la compulsa de copias del magistrado de Justicia y Paz Pinilla
Cogollo, ante lo cual mejor renunció. La creación de la segunda instancia en la
Corte, según sus creadores para mayor garantía procesal, ante las
investigaciones contra Uribe Vélez.
La
formulación de cargos del día de ayer, por los presuntos delitos de manipulación
de testigos y fraude procesal, con detención preventiva en su hogar, a pesar de
la naturaleza de los delitos, es un favorecimiento por ser quien es. La
solicitud del presidente y sus seguidores que se defienda en libertad, lesionó la independencia de la justicia. Y el derecho
fundamental a la libertad de los millares de detenidos del pueblo, sin ser
condenados, quienes merecen igual trato de casa por cárcel. Y así terminar con la congestión carcelaria.